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18/02/2025

Yaku Sumaq: la iniciativa estudiantil que busca educar sobre la conservación de los océanos

Jóvenes de distintas partes del mundo se reunieron para presentar sus proyectos y compartir su compromiso con la sostenibilidad en la cumbre climática de Turning Green en San Francisco.

Un grupo de estudiantes de la PUCP participó en un reto global sobre sostenibilidad y terminó impulsando su propio proyecto ambiental.

Todo inició con un correo que invitaba a los estudiantes de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP) a sumarse a un desafío ambiental titulado Project Green Challenge (PGC), una competencia global que impulsa la acción climática y la sostenibilidad a través de retos diarios. Claudia Caycho, una de las integrantes del equipo, recuerda el momento en que decidió participar: “Me llegó la invitación y supe que quería hacerlo, pero no quería estar sola. Así fue como nos encontramos con Janet, Link y Flor”.

Cada uno tenía sus propias motivaciones para sumarse al reto. Para Flor Rivera, el llamado a la acción era algo personal. “Vivo en Ancón y veo cómo la contaminación afecta las playas todos los días. Quería hacer algo para cambiar eso”, cuenta. Por su parte, Janet Herrera veía en la competencia una oportunidad que no podía dejar pasar: “Desde hace tiempo tenía el deseo de involucrarme en un proyecto con enfoque sostenible, pero no había encontrado la oportunidad. Finalmente, decidí dar el paso y arriesgarme, convencida de que era el momento de aportar y aprender”.

El equipo, que se conoció por el destino y la pasión compartida por el medioambiente, se embarcó en un mes de desafíos que los llevó a transformar su estilo de vida. Durante 30 días, cumplieron retos sobre movilidad sostenible, reducción del plástico y dietas basadas en plantas. “Nos reuníamos hasta las 3 a.m. para completarlos”, recuerda Flor. “Era agotador, pero también nos motivaba ver cómo otras personas en distintas partes del mundo estaban haciendo lo mismo”.

El esfuerzo valió la pena. Entre miles de participantes, fueron seleccionados como finalistas y recibieron la oportunidad de desarrollar un proyecto de impacto real. Así nació Yaku Sumaq, una iniciativa educativa que busca sensibilizar a estudiantes escolares sobre la importancia de la conservación de los océanos.

El viaje a San Francisco

Como parte del reconocimiento a su participación en el Project Green Challenge, el equipo fue invitado a la cumbre climática en San Francisco, California, un evento donde los finalistas presentan sus proyectos ante expertos en sostenibilidad, académicos y líderes ambientales​.

La responsabilidad de representar a Yaku Sumaq en Estados Unidos recayó en Janet Herrera, quien viajó en noviembre del 2024 para exponer la iniciativa frente a un jurado internacional. «Fue una experiencia increíble, pero también un reto enorme», recuerda. «Estar en un espacio con jóvenes de distintos países que comparten el mismo compromiso con el planeta me hizo ver que nuestro proyecto no solo tiene impacto local, sino que puede inspirar a muchas más personas»​.

Durante su estancia en la cumbre, Janet participó en talleres, conferencias y mesas de trabajo junto a otros finalistas, donde recibió mentoría especializada para fortalecer Yaku Sumaq. Además, tuvo la oportunidad de reunirse con representantes de Turning Green, la organización detrás del concurso, quienes brindaron retroalimentación y sugerencias para mejorar la implementación del proyecto​.

Participantes del Project Green Challenge reunidos en el evento de Turning Green, un espacio de aprendizaje y colaboración para fortalecer proyectos ambientales con impacto global.

Yaku Sumaq

Los miembros del equipo tenían claro que su proyecto debía generar un cambio tangible. Inspirados en sus propias experiencias y en la necesidad de acercar la educación ambiental a los colegios, estructuraron un programa de seis sesiones que combina aprendizaje teórico con acciones concretas.

“El océano es crucial para nuestra supervivencia, pero muchas veces lo vemos como algo lejano”, explica Link Landers. “Queremos que los estudiantes entiendan que lo que hacemos en tierra tiene un impacto directo en el mar y que ellos pueden ser agentes de cambio”.

Desde inicios de febrero del 2025, Yaku Sumaq se implementa en la Institución Educativa Nuestra Señora del Carmen en San Miguel, donde 15 estudiantes participan activamente en talleres sobre contaminación marina, microplásticos y conservación de los ecosistemas costeros. Además, el proyecto ha sumado aliados estratégicos como la ONG Conciencia Marina, Por Mi Parque Lima y RUA PUCP, que brindan apoyo en logística, y  el asesoramiento académico de Alonso Velasco Tapia, secretario académico de la facultad de educación.

“El mayor reto ha sido organizarnos”, admite Janet. “No teníamos experiencia en estructurar un proyecto así, pero hemos aprendido sobre la marcha. Ahora sabemos que el cambio empieza con pequeñas acciones”.

Mientras el equipo avanza con la ejecución del proyecto, la competencia aún no ha terminado. En abril, Yaku Sumaq será evaluado junto con otras iniciativas finalistas para determinar al ganador del Project Green Challenge. Sin embargo, más allá del resultado, los estudiantes tienen una meta clara: que su iniciativa trascienda y se convierta en un modelo replicable en otras instituciones educativas.

Para Claudia, este proceso ha sido una confirmación de la importancia de las universidades en la promoción del liderazgo estudiantil en temas ambientales. “Muchas veces hemos sido voluntarios en proyectos ajenos, pero esta vez es diferente. Ahora somos nosotros los que estamos creando algo desde cero”, refiere.

El mensaje que quieren transmitir a otros estudiantes es claro: no se necesita ser un experto para generar un cambio. “A veces, creemos que para hacer algo grande debemos tener todos los conocimientos o recursos”, reflexiona Janet. “Pero, en realidad, cualquier persona puede empezar desde su comunidad. Solo hace falta querer hacerlo”, concluye.