En el marco del evento “Energía Limpia, Contaminación y Conservación Marina: WWF & R4W”, realizado en la PUCP por la organización RUA NODO PUCP, Clima de Cambios entrevistó a Camille Rollin, ponente en el evento y especialista de los proyectos de Race for Water sobre transformación de plástico a energía limpia.
La fundación Race for Water, también conocida como R4W, es una organización que se dedica a la preservación de agua, tiene como objetivo identificar, promover y ayudar a implementar soluciones de recuperación de residuos plásticos para evitar su ingreso al océano.
¿Podemos aspirar a tener un mar menos contaminado?
Uno de los mayores problemas, es que hay muchas fuentes de contaminación, nosotros nos enfocamos sobre todo en el plástico, ya que es el elemento más inmerso en nuestras vidas. Además hay pocos países que saben manejar el impacto que el plástico produce al medio ambiente. Debemos saber que, limpiar el océano de manera completa es imposible. Hicimos una primera expedición en el 2015 para ver el nivel de contaminación que había en los océanos, el inconveniente con intentar limpiar el plástico del océano es que se fragmenta de manera tan pequeña que se vuelve invisible al ojo humano, otro inconveniente es que el plástico entra a partes del océano que es imposible de limpiar. Hoy leí un artículo en que decía que encontraban residuos plásticos en lo profundo, a diez mil metros de profundidad.
¿Qué se puede hacer para evitar que la contaminación de los océanos siga aumentando?
Sabemos de dónde viene la contaminación, es la actividad humana en la tierra, en las islas, en las ciudades, cerca de los ríos, cerca del mar. Es por ello que es aquí mismo, en tierra, donde debemos actuar. Las partículas de plástico atraen los contaminantes que hay en el agua, por eso son mini-bombas tóxicas, estas partículas son comidas por los peces, que a su vez son comidos por peces más grandes, y al final de toda esta cadena, estamos nosotros. Sabemos que hay micro-partículas de plástico en varios lugares, en el agua de botella o en el agua del caño. Por ello, debemos cuidarnos del plástico, puede ser peligroso si es mal manejado, sumado a que ya de por sí, lo utilizamos demasiado en nuestra vida cotidiana. Hay varias cosas que se deben hacer, prohibir ciertos tipos de artículos hechos de plásticos, reutilizar al máximo los productos, para aumentar su vida útil, reparar lo que pueda ser reparado. Hay muchas cosas que cada uno puede hacer.
Entonces ¿Cualquiera puede ser actor en este proceso de cambio?
Si, por eso trabajamos con todo tipo de público. Dentro del ámbito de educación, con niños y estudiantes, hacemos talleres con los gobiernos, con las universidades, varias ONG, para hablar de la problemática. En Perú trabajamos con los congresistas, con el Ministerio de Medio Ambiente, tratando los nuevos proyectos de ley esperemos que vayan a ser aprobados. Ahora, están trabajando todos juntos, para presentar una sola propuesta de ley, lo cual es muy positivo. También trabajamos con el sector industrial, ya que creo que deben involucrarse más en todo el proceso de vida útil de sus productos. Y la otra parte que abordamos es el desarrollo de proyectos, por eso nos hemos quedado tanto tiempo en Perú, buscamos implementar proyectos para agregarle valor a los residuos plásticos. El trabajo con plástico es complicado, en el proceso de reciclaje, se tiene que segregar, eso requiere mucha logística e infraestructura que cuesta mucho. Por ello buscamos otro tipo de solución, la de transformar los residuos de plástico a energía con pirolisis a altas temperaturas, el proceso se puede realizar con cualquier tipo de plástico, por lo que no se necesita la segregación. Es en lo que hemos estado trabajando en estos dos últimos meses.