El 2019 ha iniciado con modificaciones del climas en varias partes del mundo. El Perú se encuentra enfrentando un calor récord con temperaturas que llegan hasta los 36 °C, mientras que, en Estados Unidos y parte de Canadá, las temperaturas llegan a -39°C, convirtiéndose en una de las olas de frío más fuertes en su historia. Por su parte, Australia viene afrontando incendios forestales y tanto los Alpes como el Himalaya, fuertes nevadas. ¿A qué se deben todos estos cambios?
Clima de Cambios conversó con José Macharé, Director el Instituto Científico del Agua – PUCP, sobre los cambios climáticos que se vienen suscitando en algunas partes del mundo y sus causas. “La variaciones climáticas que estamos viviendo están ligadas a un cambio climático global. Hay muchas medidas de parámetros que muestran que los climas de la Tierra están siendo modificados y el motor de todo esto es el calentamiento global. Este calentamiento, medido desde 1850, se ha acelerado en los últimos 50 años y por eso se le asocia con el incremento de las diversas actividades humanas”, subraya Macharé.
El calentamiento global no implica contaminación
Este es un proceso que se desarrolla por el aumento de dióxido de carbono y otros gases en la atmósfera que no son necesariamente contaminantes, pero si retienen el calor en la superficie de la Tierra, por lo que se les llama gases de efecto invernadero. El cambio climático ocurre en cada región de una manera diferente, y esto es una consecuencia de las modificaciones de la circulación del océano y la atmósfera.
José Macharé indica que las altas temperaturas que se han ido suscitando en nuestra capital provoca que haya mayor demanda de agua; sin embargo, esto se convierte en un grave problema público ya que, Lima es una ciudad que enfrenta estrés hídrico, es decir, sufre de insuficiencia de agua para el abastecimiento doméstico e industrial.
Además, estamos en el contexto de otro proceso climático como es el Fenómeno El Niño que, aunque débil, genera de igual manera un calentamiento adicional en la temperatura superficial del mar. Estas modificaciones en el clima, ya sea por el incremento de lluvias en la sierra o por las altas temperaturas en diversas zonas del país, conlleva a que empecemos a desarrollar políticas de adaptación ante estos impactos.
Para Macharé “adaptarse” significa “gestionar mejor el agua: mejorar las prácticas de riego, de vida e incluso las industriales; significa evitar que los efectos del cambio climático nos hagan daño y perjudiquen nuestra biodiversidad”. Por eso, es necesario controlar la explotación indiscriminada de bosques, la minería ilegal e incluso prestar atención al control de plagas porque estas pueden afectar tanto a los cultivos como a las personas. “Como país, debemos enfocarnos en protegernos de los efectos negativos del cambio climático, a través de la adaptación”, finalizó.
¡Si tu cambias, el clima también!
