¿Cuál es el nexo que existe entre el medio ambiente y los DD.HH?
Este año se cumplen los 70 años de la Declaración Universal de los DD.HH y en ese marco, es importante resaltar el vínculo que existe hoy en día entre los derechos humanos y medio ambiente. Entonces, entendemos que la salud, la vida, la alimentación son derechos de las personas para tener una vida digna. Se entiende casi por lógica que para poder disfrutar de esto, dependemos de un ambiente adecuado; entonces, bajo esta premisa, tenemos que dejar en claro y promover que la defensa del medio ambiente y el combate contra el cambio climático, pasa necesariamente por este eje transversal que es la defensa de los derechos humanos de las personas.
¿Por qué es importante abordar las ODS desde este enfoque?
Todos los ODS pasan por el tema de DD.HH, porque es un eje transversal. Hay ODS que están enfocados en el medio ambiente como “Acción por el Clima” o “Vida Submarina”, y evidentemente tienen un peso específico en el campo del medio ambiente y en el combate del cambio climático. Los ODS reafirman que esta es una tendencia que debe ser asumida como necesaria y prioritaria para los Gobiernos, los Estados y la sociedad civil para que se considere que la degradación del medio ambiente afecta directamente a los derechos humanos de las personas.
¿Cuál es el panorama en cuanto a la defensa del medio ambiente?
La COP 24 en Polonia acaba de empezar, entonces esto significa que es un esfuerzo más por parte de los Estados miembros por seguir avanzando. Por eso, se puede decir que en algunos aspectos se está mejorando, el solo hecho que podamos decir que hoy seguimos trabajando sobre los acuerdos de París y ver cómo en algunos países se está llevando a cabo, es alentador. Sin embargo, hay todavía preocupaciones serias que atender. Desde el 2012 las Naciones Unidas tiene un relator especial de DD.HH y medio ambiente en cuyo último informe, ha mencionado algunas cifras que son alarmantes. Por ejemplo, el número de muertes prematuras por año es muy alto llegando a 8 millones, y esto tiene se debe por la exposición a la contaminación y a otros peligros ambientales. Evidentemente, estas cifras alarman y hay que tomar acción sobre ello.
Pero por otro lado, hay iniciativas de los países que pueden ser destacadas como buenas prácticas: el combate contra la deforestación, el combate al uso indiscriminado de fósiles para energía, o la lucha para mantener un parque automotor que contamine menos. Lo que sí falta, es un mayor impulso por parte de la comunidad internacional para poder tener una serie de decisiones que puedan llevarnos a cumplir los acuerdos de París del 2015, y con ello, tener leyes y políticas medioambientales más potentes. Pero, sobre todo hay una necesidad de incluir mecanismos que permitan la participación de la sociedad civil en cada país, debido a que, los mayores afectados son las personas que se encuentran en situaciones de vulnerabilidad. Entonces, aquellos que son afectados por la degradación del medio ambiente serían los mejores vigilantes y se debería trabajar en su empoderamiento para que estas personas sean los mejores aliados. El movimiento ciudadano es sumamente importante.
¿Qué se espera de la COP 24?
Lo que hace las Naciones Unidas es poner la plataforma, procurar facilitar la negociaciones, impulsar a los países a participar; pero finalmente, esta es una Conferencia de las Partes y son los Estados miembros quienes toman las decisiones. Mis expectativas son las mejores, nuestra visión es mantener el optimismo al tope porque es sobre la base de esta política en que podemos esperar lo mejor de la COP. Si bien es cierto, hay complicaciones políticas y económicas que considerar al margen de lo medioambiental, pero también hay posibilidades de avanzar.
