Noticias
15/11/2011

PUCP obtiene patente de nuevo material ecosostenible

 

La calidad de la tecnología creada en nuestra Universidad ha sido puesta en evidencia con la obtención de una nueva patente para la PUCP, otorgada por el Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedad Intelectual (INDECOPI) a un novedoso material denominado “fibrocemento”, el cual puede ser utilizado para la elaboración de calaminas y paneles no contaminantes y tóxicos.

 

El fibrocemento fue inventado por el ingeniero mecánico Carlos Fuentes, Julio Acosta, profesor del Departamento de Ingeniería y Ana Pastor, profesora del Departamento de Ciencias, con el objetivo de contribuir con el cuidado del medio ambiente y de brindar a la población con menos recursos la posibilidad de acceder a una vivienda digna, cuyos materiales de construcción no atenten contra su salud.

 

El material en mención está compuesto por cemento, fibras naturales (como sisal, cabuya y yute), celulosa (obtenida de papel y cartón reciclado) y quitosano, un biopolímero natural proveniente de los insectos y crustáceos que actúa como un plástico natural, el cual posee propiedades fungicidas. Para su elaboración, los investigadores desarrollaron un procedimiento específico para el tratamiento de las fibras con el quitosano y otro para la fabricación del material.

 

El quitosano se obtiene en laboratorio a partir de exoesqueletos de crustáceos. Este es un subproducto de la industria de acuicultura y pesca de langostinos y pota. Usualmente es un desecho que se convierte en un problema ambiental ya que por ser organicos se descomponen contaminado la zonas aledanas a la empresas pesqueras. Con el fibrocemento, el quitosano deja de ser desecho para convertirse en insumo. Es, además, un agente para controlar la contaminacion por materia organica de las industrias pesquera y de alimentos.

 

Si bien en un primer momento se planeó utilizar el fibrocemento para el recubrimiento de techos, este puede emplearse también en exteriores o para hacer divisiones dentro de una casa. Este material de buenas propiedades, ecológico, no cancerígeno y barato, se puede aplicar en el sector de la construcción para satisfacer la demanda de vivienda de pobladores de escasos recursos y eliminar los problemas respiratorios que puede ocasionar el asbesto de las calaminas que se venden actualmente en el mercado.